16.10.13

El día en que decidió llorar II.

"¿Qué desde cuando nos conocemos? No Tengo idea, ¿debo hablar de años?, ¿de meses?, ¿o minutos?, puedo sacar los segundos si es necesario, pero sería una pérdida de tiempo.

Yo preguntaría ¿hace cuánto se vieron por completo, desnudas, tal cual son? Y la verdad, tampoco sabría decir algo exacto de ella, es así, siempre. ¿Nos parecemos? Claro, no seriamos amigas si no fuera así, ¿es acaso esa la respuesta más sensata? Aunque si de engañarte se tratara no estaría escribiendo todo esto, me limitaría a responder con monosílabos, lo que no quiero, es que siempre he sido educada –no como ella-, ahí ya puedes ver una diferencia. Ahora, ¿por qué? Esto si es importante y básico, creo que en toda relación de amistad uno debería saber preguntarse ¿por qué ella y no otra? Vamos, podría ser cualquiera si no tuviera nada especial. Aunque ella es bastante “especial” en muchos sentidos de la palabra, siempre le he dicho que esta “cagada de su cabeza”, si, con las mismas palabras, ella lo acepta, pero por otro lado no tengo derecho para criticarla, ¿ustedes, lo tienen?

En cierta medida todos lo estamos actualmente, puede que sea culpa de esta sociedad que nos atosiga a diario con reglas y guías exactas de cómo hacer, para dónde ir, y cómo reaccionar frente a los distintos baches de la vida, pero también me parece que todo esto son excusas porque somos poco talentosos para salir de los problemas sin caernos en el camino. Por eso todos estamos un poquito “cagados de la cabeza” hoy en día, aunque nuestra locura, a nosotras por lo menos nos acerca, nos permite hablar de cosas que con otras personas jamás tocarías, y creo que aquí está el punto que nos une totalmente, es la profundidad natural con que nos invitamos a hablar de las amarguras, de las felicidades, y de las cruces que llevamos con nosotras a diario, aunque no nos contemos todo –toda persona tiene sus secretos- nuestra intimidad es única, compleja, y a veces más que amarga. Aunque hay algo que nos diferencia profundamente, y es el problema con ella en estos momentos.

Ella como persona ha abandonado la esperanza, su precipicio es demasiado extenso y su forma de luchar demasiado precaria. 
Ella es una cobarde, mucho más cobarde que yo, y lo digo porque soy su amiga."

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